En la noche del jueves 3 de noviembre de nuevo miles de estudiantes se tomaron una de las principales vías céntricas de la ciudad de Medellín. Sin embargo no fue necesario interrumpir el tráfico de vehículos, ya que a la y lado de la avenida Oriental se ubicaron los estudiantes con antorchas, con velas, con antifaces de colores, con sus rostros maquillados, con camisetas estampadas, en fin, manifestándose por medio de la música y las arengas en contra de la reforma a la ley de educación superior que nos quieren imponer.
Los transeúntes observaban extrañados mientras recibían información de parte de los estudiantes, terminando finalmente apoyándolos con sus aplausos o con los pitos de los carros.
Fue una jornada simbólica, bonita, desbordante de imaginación y creatividad que supo llegar no sólo al corazón de la ciudad, de la zona más concurrida en hora pico, sino también al corazón de las personas, de los ciudadanos del común que comienzan a comprender y apoyar nuestra lucha por una mejor educación.
Para la semana próxima se están programando otra serie de actividades que tienen como fin además, recaudar recursos para apoyar a los 36 estudiantes que llevan ya varios días caminando hacia la ciudad de Bogotá. Asegurando también la asistencia masiva de estudiantes de todas las universidades públicas y privadas y los institutos de educación superior que se han vinculado a la lucha, para la toma de la capital el 10 de noviembre.
Desde las aulas hacia Colombia
