Han
sido múltiples las iniciativas que, desde la sociedad colombiana e
incluso, desde la comunidad internacional, han surgido en búsqueda del
fin del conflicto que durante más de 60 años ha venido desangrando los
rincones de nuestro país. Así mismo, han sido varios los intentos que se han gestado para que dicho fin del conflicto sea en el marco de conversaciones que involucran, principalmente, y luego del genocidio de la Unión Patriótica, a los actores armados, el último de los cuáles finalizó, infructuosamente, hace más de 10 años en San Vicente del Caguán.
Sin embargo, y entendiendo que el conflicto en Colombia responde a unas
problemáticas estructurales de índole social, política y económica, que
por lo tanto permean al conjunto de la sociedad colombiana, que se
convierte en víctima de dicho conflicto, bien sea como consecuencia
directa de la confrontación armada o como consecuencia de la profunda
inequidad que azota al país, el “Encuentro Nacional de Comunidades
Campesinas, Indígenas y Afrodescendientes por la Tierra y la paz en
Colombia” llevado a cabo en la ciudad de Barrancabermeja, Magdalena
Medio del 12 al 15 de agosto del año pasado, demostró que el diálogo es
la ruta.
Por lo tanto, los miles de asistentes a dicho
encuentro manifestamos nuestra preocupación por la manera en la que se
está entendiendo la paz, pues somos conscientes de que la misma no es
cuestión de llaves y cerrojos y muchos menos una definición de unos
pocos a la luz del silencio de los fusiles.
Por el contrario,
hemos entendido que la paz sólo es posible si se trata de una paz con
justicia social, en la que se le den solución a los problemas
estructurales que han llevado a la existencia de dicho conflicto y que,
sobre todo esa paz, la paz con justicia social, debe ser un compromiso y
un acuerdo de la sociedad colombiana en general.
Ahora, ante
la inminente instalación de una nueva mesa de diálogos entre las FARC –
EP y el gobierno nacional, se convierte en una necesidad que desde
diferentes ámbitos de la academia se realice un análisis de las
implicaciones y alcances de esta nueva mesa de diálogo, así como del
papel que debe jugar la sociedad colombiana
para obtener la tan anhelada justicia social.
OBJETIVOS.
• Realizar un análisis del contexto político y social que enmarcan la
instalación de una nueva mesa de diálogos de paz en Colombia.
•
Brindar elementos de análisis sobre el carácter, las causas y el
desarrollo actual del conflicto social y armado en Colombia, así como de
sus consecuencias para el conjunto de la sociedad.
•Propiciar el debate, desde la academia, sobre el papel de los diferentes sectores sociales para la consecución de la paz.
4: 00 p.m. Instalación del evento y palabras de los organizadores.
4: 20 p.m. Caracterización del régimen político colombiano: Daniel Libreros.
4: 40 p.m. Recuento histórico de las diferentes iniciativas e intentos de acuerdos de paz: Santos Alonso
5: 00 p.m. Diferentes aproximaciones teóricas al concepto de paz: Sergio de Zubiria.
5: 20 p.m. Los movimientos sociales en Colombia y su apuesta por la paz: Jairo Estrada y Congreso de los Pueblos.
5: 40 p.m. Constituyentes regionales por la Paz: Andrés Gi - Dirigente
Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra y Vocero Nacional
Movimiento Político y Social Marcha Patriótical (Por Confirmar).
6: 00 p.m. Congreso de los Pueblos y Minga Social y Comunitaria.
6: 20 p.m. ¿Cuál es el alcance de la consigna de la MANE “Por una Nueva
Educación para un país con Soberanía, Democracia y Paz” en el marco de
las mesas de diálogo?: Álvaro Forero - Vocero Nacional MANE
6: 30 p.m. Participación del público.
Auditorio Principal Facultad de Ciencias Económicas Universidad Nacional de Colombia
Convocan:
Colectivo Agrario Abya Yala.
Colectivo de Economía.
Centro de Estudios Universitario Raúl Alameda Ospina.
Colectivo de Pensamiento Crítico en Ciencias Económicas – COPCCE–.
Grupo de Estudios de Coyuntura Económica – GRECO FCE –.
Observatorio Crítico Jan Farid Cheng Lugo.