Nahúm Guerra, de 17 años, primera víctima mortal del actual conflicto educativo en Honduras. (Kaosenlared.net)
Unos 150 colegios en todo el país permanecen cerrados por los alumnos, en protesta por la presentación del proyecto de la ley que buscaría privatizar la educación. El Gobierno de Lobo dio plazo hasta este jueves para desalojar las escuelas.
El Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) de Honduras informó del asesinato de el joven Nahúm Guerra, de 17 años, la noche del pasado 22 de agosto cuando hacía guardia en el portón de una institución educativa que se mantiene tomada por los estudiantes.
El Frente Departamental de Resistencia de Santa Bárbara informó que los hechos sucedieron en la Escuela Agrícola “Pompilio Ortega” de Macuelizo, en la carretera internacional de Occidente, cuando desde un vehículo un desconocido les gritó “huelguistas”, y acto seguido procedió a disparar contra los jóvenes estudiantes, hiriendo al joven en el pecho y brazo.
Los estudiantes de la “Pompilio Ortega” se unieron a las protestas que desde hace cuatro semanas mantiene el sector estudiantil en defensa de la educación pública.
Unos 150 colegios en todo el país están tomados por los estudiantes, en protesta por la presentación del proyecto de la Ley General de Educación en el Congreso Nacional.
El ministro de Educación de Honduras, Alejandro Ventura, reiteró este miércoles que mañana jueves vence el plazo para que estudiantes y maestros abandonen la toma de escuelas y amenazó con desalojos policiales.
A pesar que se había anunciado que para hoy los colegios retornarían a clases, tras un urgente llamado a dialogar formulado por el gobierno, el diario local La Tribuna informó que varios centros educativos siguen en poder de la dirigencia del Frente Amplio Estudiantil de Resistencia (FAER).
Ventura indicó que el plazo para los estudiantes que mantienen centros educativos sin clases vence este jueves, y llamó a las bases del magisterio a presentar propuestas para enriquecer el proyecto de una nueva ley de educación.
Ventura afirmó que a partir de la próxima semana “no se permitirán tomas en los colegios” y dijo que “están listos para recuperar los centros educativos a través de desalojos” realizados por la policía.
El presidente Lobo convocó a un diálogo para concertar la iniciativa y poner fin a una crisis educativa que estalló hace un mes con la protesta estudiantil, a la que se unió el magisterio.
La nueva ley pretende reemplazar a una de 1966, pero estudiantes y profesores la miran con reservas y consideran que el gobierno persigue privatizar la educación.
En la mesa de diálogo, el presidente del Congreso, Juan Orlando Hernández, se comprometió a retirar el proyecto oficial para elaborar uno nuevo que sea producto de consenso.
Fuente: La Radio del Sur