Ni la lluvia, ni los ocho grados centígrados que por esta época se viven en la ciudad de Santiago de Chile, impidieron que más de 120 mil estudiantes, trabajadores y padres de familia salieran de nuevo a las calles para manifestarse en contra del actual sistema educativo, instaurado desde la dictadura de Pinochet y que permite el ánimo de lucro en las instituciones de educación superior.
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| Foto: Prensa Latina |
Desde tempranas horas de la mañana comenzaron a reunirse en la Plaza Italia para marchar en medio de música y muestras culturales por La Alameda, una de las principales avenidas de la capital y que pasa por el Palacio de La Moneda; este recorrido no estaba permitido desde las multitudinarias marchas que se llevaron a cabo el año pasado y que derrumbaron hasta mínimos históricos la popularidad del presidente Sebastián Piñera.
Los carabineros, policía militarizada, hicieron presencia desde antes de comenzar la marcha en puntos estratégicos de la ciudad y se encargaron de lanzar chorros de agua y gases lacrimógenos en contra de los manifestantes. Se presentaron enfrentamientos al finalizar la marcha con personas con sus rostros cubiertos.
Gabriel Boric, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (una de las más influyentes universidades chilenas) declaró a través de su cuenta en Twitter: "Que rabia que quieran reventar la marcha. Hago un llamado a los estudiantes a no caer en las provocaciones absurdas que sólo buscan criminalizar al movimiento estudiantil".
El movimiento estudiantil chileno a logrado convocar al grueso de la sociedad, pues no sólo se han unido a sus justas luchas estudiantes de universidades privadas y de secundaria; sino además sus padres y miles de trabajadores que son quienes se ven afectados económicamente por uno de los sistemas educativos más privatizados del planeta.
Con las cuatro marchas que van hasta ahora en el transcurso del año y con las manifestaciones culturales de todo tipo que se evidenciaron el año pasado, han logrado también traspasar fronteras y servir de ejemplo para las luchas de los estudiantes en toda América Latina.
Información de Prensa Latina
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