El secretario general del Consejo Interuniversitario de Cataluña (CIC), Claudi Alsina, es partidario de que los claustros universitarios tengan unos 50 miembros, para hacerlos más ágiles, a pesar de que la ley permite un máximo de 300.
En una entrevista concedida a Efe, Claudi Alsina ha apostado por la reducción del número de miembros de la comunidad universitaria que participan en los claustros ya que, a su juicio, facilitaría el gobierno de las universidades públicas, entre otros aspectos.
La Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Universidades (LOMLOU) contempla que los claustros puedan llegar a tener unos 300 miembros como máximo, en representación de los estudiantes, personal de administración y servicios, catedráticos y profesores permanentes doctores.
La mayoría de universidades públicas catalanas tienen claustros amplios que, en los últimos meses, se han convertido en termómetros de las tensiones y de la complicada situación económica que arrastran algunos centros, con rechazos a los últimos recortes impuestos por el gobierno catalán, como sucedió en la UB el pasado año.
De hecho, el Govern ha apostado por reformar el sistema de gobernanza de las universidades públicas de Cataluña con la creación de una comisión que debe debatir a lo largo de este año cómo hacerlo.
El modelo español de funcionamiento de la universidad "no es bueno" y "encorseta" a Cataluña y también a España, ha considerado en varias ocasiones el conseller de Economía y Universidades, Andreu Mas-Colell, con el que coincide Alsina, que apuesta por claustros claramente más reducidos.
"Con unos 50 miembros que representaran a todos los colectivos en los claustros y una redefinición del consejo social" se conseguiría más agilidad para las universidades, y sin necesidad de muchos cambios legales, ha considerado el secretario general del Consejo Interuniversitario de Cataluña.
Todo ello con respeto a la autonomía universitaria, matiza Claudi Alsina, conocedor de lo sensible que es este tema para los rectores y para la comunidad universitaria en general.
También opina que el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, de quien dependen las universidades, "es el primer interesado" en mejorar el sistema de gobernanza, por lo que este debate previsiblemente estará en la agenda del Gobierno en los próximos meses, coincidiendo con el debate iniciado en Cataluña.
Alsina ha precisado que "todo el mundo", refiriéndose a los principales protagonistas del sistema universitario, considera necesario cambiar la gobernanza de las universidades.
Una parte del profesorado y de los estudiantes, sin embargo, agrupados en la Plataforma Unitaria en Defensa de la Universidad Pública, han convocado en varias ocasiones protestas coincidiendo con reuniones de la comisión que debate la modernización de la gobernanza, al opinar que se está dejando de lado a una parte de la comunidad universitaria.
Además de la gobernanza, Claudi Alsina se ha mostrado también partidario de variar el actual modelo de financiación de las universidades, así como el sistema de contratación de profesorado, con cambios legales si fuese necesario.
Fuente: eleconomista.es
