Dos auxiliares y un Patrullero de la Policía Nacional que se ubican en la entrada de la estación Av. Jiménez de TRANS MILENIO en la ciudad de Bogotá D.C., detuvieron arbitrariamente al Joven Misionero Claretiano estudiante de teología, Faiver Medina Robayo Identificado con C.C 12145372 Palermo (Huila), sometido a tratos crueles, inhumanos y denigrantes, en hechos ocurridos a la 7:00 p.m. de la noche del miércoles 5 de septiembre de 2012. Medicina legal después de diagnóstico realizado el día 6 concluyó: la agresión se dio en términos contundentes, abrasivo, por golpes, heridas en la piel y hematomas y otros dando incapacidad médico legal por 12 días y remitirse en un mes para ver posibles secuelas.
Denunciamos que el abuso de autoridad y tratos crueles por parte de la Policía Metropolitana y por miembros del Ejército Nacional en este lugar son una práctica sistemática que no es denunciada ya que la mayoría de víctimas, humildes y temerosas, no encuentran garantías y mecanismos que contribuyan a hacer justicia y no repetición en estos casos.
Hechos
La detención inició con una requisa, a la cual el joven religioso accedió sin reparos. Sin embargo, el proceder de las autoridades policiales fue: obligarle a abrir las piernas, subir las manos, después de esto un auxiliar procedió a la requisa, apretó sus partes intimas (los genitales) ocasionándole dolor, en un acto de evidente abuso de autoridad, sobrepasando los límites y agrediendo la dignidad del joven religioso, seguidamente el uniformado paso su mano por entre la ropa hasta el recto. Luego hicieron sacar todo lo que llevaba en los bolsillos de sus prendas, pantalón y chaqueta.
En ese instante se acercó un Oficial de Policía (Patrullero) hablando por el equipo de comunicación donde recibía la orden de llevarlo al CAI, sin sindicarle ningún cargo, o manifestarle algún requerimiento de un ente judicial de manera verbal o escrita o hallarse en un acto de flagrancia o generando algún desorden público. Todo lo contrario el joven religioso iba a sacar unas copias para su jornada de estudios en la universidad. Sin oponer resistencia fue conducido a la fuerza, a empujones y sujetado fuertemente por el cuello con su chaqueta, mientras hacía esfuerzos para que lo escucharan identificándose una y otra vez como religioso y exigiendo se le respetaran sus derechos. En el CAI lo obligaron a desnudarse: una vez en ropa interior lo querían obligar a desnudarse totalmente, realizar cunclillas y a saltar tres veces; al negarse le propinaron una paliza, tirándolo al piso, dándole patadas, y golpes, dejando huellas de aruñones en su cuerpo. Luego lo amenazaron con llevarlo a la UPJ.
Seguidamente propio de una detención arbitraria, lo confinaron en un calabozo en esta dependencia (CAI San Victorino). Más tarde le quitaron su identificación y lo llevaron en un camión de la Policía supuestamente para la UPJ, llegaron a un lugar frente a la Universidad de los Andes y él les pregunta por la UPJ, le respondían que más tarde…, quién sabe… Luego lo cambiaron a otro camión. El sacerdote Carlos Julio Rozo llego para acompañarlo en este lugar y para garantizar que lo liberaran y no le agredieran más; al llegar los abogados defensores de derechos humanos de la Fundación Comité de Solidaridad con los Presos Políticos, se convino con los agentes de policía que el Padre acompañante, hermano de comunidad religiosa, firmara un acta de buen trato como requisito para la entrega del Joven estudiante, aclarando que esta corresponde al trato brindado en ese último lugar, y no de los hechos ocurridos en el CAI de San Victorino.
Antecedentes
Son contantes las violaciones a los derechos de transeúntes que circulan por el lugar, incluidos los religiosos y funcionarios que prestan servicios humanitarios a los habitantes de la calle y comerciantes.
Son reiteradas las violaciones a los derechos humanos ocasionados por Militares y Oficiales de Policía a los habitantes de la calle, los cuales nunca denuncian.
El día 4 de septiembre se presentó un enfrentamiento entre la policía y personas que dispararon ante un allanamiento, resultando lamentablemente, muerto un oficial de la Policía Nacional.
El 14 de marzo del 2012, a la madrugada fueron asesinadas tres persona y heridas otras tres en un local de la calle del Bronx, en el transcurso de la mañana un allanamiento comandado por la Policía destruyó improvisados ranchos y toldos pertenencias de los habitantes de la calle, donde se apostan para dormir, comer y realizar parte de su vida.
Derechos Vulnerados
Detención arbitraria, tratos crueles, inhumanos y degradantes, degradación a la persona en vía pública, restricción a la libre movilidad, abuso de autoridad, amenaza al derecho a la vida y a la integridad personal.
Fundamentos de Derecho
Son diversos los fundamentos de derecho internacional adoptados por la legislación nacional que prohíben este tipo de hechos cometidos por autoridades públicas, citamos algunos.
Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, Articulo no. 5. “Nadie será sometido a torturas ni penas o tratos crueles, inhumanos y degradantes”.
Convención Americana sobre Derechos Humanos de 1978, Artículo 5 y 5.2.
Aprobación de la “Convención contra la Tortura y Otros tratos o Penas crueles o degradantes adoptada en Naciones Unidas el 10 de dic. De 1984, mediante Ley 70 de 1986; Aprobación la Convención contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, mediante la Ley 405 de 1997 y la convención Interamericana para Prevenir la tortura Ley 409 de 1997.
Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional de 1999 Articulo 7y 8.
Código Penal Colombiano, Tipifica este delito.
Declaración Universal de los Derechos Humanos, Articulo 13- 1- Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado.
Solicitudes
Solicitamos a las autoridades del Gobierno del Distrito con organizaciones de la sociedad civil defensoras de derechos humanos y de población vulnerable una reunión urgente para abordar esta situación y garantizar que no se repitan hechos similares a otros ciudadanos; y entre otras, las siguientes consideraciones:
A la Fiscalía General de la Nación proceder en términos de eficacia en la investigación de la denuncia impuesta el día 6 del presente.
Al Alcalde Mayor de Bogotá Doctor Gustavo Petro, para revisar con las autoridades policiales y militares de la zona el trato que están dando a los ciudadanos.
Al Doctor Dr. Camilo Castellanos Oficina de Derechos Humanos y Acceso a la Justicia, de la Secretaria de Gobierno Distrital, promover y dar curso a las investigación a los oficiales que comente actos contra los derechos humanos del las personas que habitan y se movilizan por el sector, en principio los que estaban de servicio el día 6 de septiembre en el CAI de San Victorino. De igual maneracrear mecanismos de control a las autoridades de Policía y unidades militares que prestan sus servicios en el sector.
A la Personería Distrital y Defensoría del Pueblo. Con el fin de solicitar su presencia permanente en el sector en el cumplimiento de sus funciones de defensores de los derechos de los ciudadanos.
A la Procuraduría para que se establezcan mecanismos para que los ciudadanos humildes de la calle del Bronx y sus alrededores puedan dirigir sus quejas y denuncias con fines disciplinarios y penales.
Solicitamos de manera especial que si se tienen o programan operativos para atacar focos de delincuencia en el sector se respeten los derechos de las personas inocentes que habitan la calle y las viviendas. Ser humildes, habitantes de calle, consumidores de psicoactivos, recicladores, mendigos no es sinónimo de criminal, lo contrario hay un alto grado de vulnerabilidad y se le debe tratar con mayor respeto y consideración.
Alertamos sobre la tensa calma que se vive en el sector después de los últimos acontecimientos y el temor de muchos habitantes de la calle que manifiestan con preocupación amenazas y sentido de venganza por muerte del agente de policía.
Finalmente insistimos en la alerta por los riesgos que corren y solicitamos como ciudadanos y organización de la sociedad civil: protección social para los habitantes de la calle, de las viviendas del sector y de la calle del Bronx, pues conocemos de personas honestas que por circunstancias sociales han tenido que venir a sobrevivir en la zona: hombres, mujeres, muchos niños y niñas y jóvenes en altísimo grado de vulnerabilidad.
Prensa Universidad
Desde las aulas, hacia Colombia.
Desde las aulas, hacia Colombia.
