La detención del profesor de Filosofía de la Universidad de Caldas y Universidad Nacional sede Manizales, Jaime Alberto Pineda, se produjo el pasado 5 de diciembre. El Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos hace un llamado al respeto por su dignidad humana.
ANTECEDENTES.
1. El 22 de noviembre fueron capturados arbitrariamente, egresados de la Universidad de Caldas de las áreas de Medicina, Sociología, Trabajo Social, Biología, Filosofía y Letras.
2. Luego de estas ocho capturas se conoció la existencia de una novena captura contra el Profesor Pineda en el marco del mismo proceso que data del 2006.
HECHOS
1. Conocida la existencia de la orden de captura, el profesor Pineda en compañía de su abogado se presenta ante la fiscalía el día miércoles 5 del mes de diciembre del año en curso; la fiscalía procede de inmediato a solicitar la detención intramural la cual se hace efectiva.
2. El sustento para estas capturas está basado en declaraciones y señalamientos recibidos a personas acogidas al programa de desmovilización (informantes) por hechos supuestamente ocurridos en el año 2006.
EXIGIMOS
1. A la Procuraduría General de la Nación y la Defensoría del Pueblo estar atentos y garantizar que se cumpla y se respete el debido proceso.
2. A los organismos de control del Estado, el Instituto Nacional Penitenciario INPEC, la dirección de la institución carcelaria de varones de la ciudad de Manizales, respetar el debido proceso y la dignidad humana del profesor Pineda, teniendo en cuenta que la privación de la libertad no lleva en ningún momento a la privación de los Derechos Humanos de las personas.
3. A los medios de comunicación nacional y local a respetar la dignidad humana del profesor Pineda, ser objetivos en la presentación de la noticia y abstenerse de emitir conceptos que violenten el derecho a la presunción de inocencia.
LLAMAMOS
A los Organismos de Control del Estado, medios de comunicación, organizaciones defensoras de los Derechos Humanos Nacionales e Internacionales, Oficinas en Colombia del Alto Comisionado de Naciones Unidas, del Comité Internacional de la Cruz Roja; a los movimientos: sindical, estudiantil, femenino, cívico popular y comunidad en general a exigir el respeto por el debido proceso, los derechos humanos y la dignidad humana del profesor JAIME ALBERTO PINEDA.
Así mismo studiantes de las universidades donde Pineda ejercía su labor como docente afirmaron que este es otro de los casos de persecución política en el país, donde sistematicamente han estigmatizado a la comunidad acádemica que pretende construir una academia crítica, como el caso del profesor Miguel Ángel Beltrán. Estudiantes del programa de Filosofía de la Universidad de Caldas presentaron una sentida carta en la que expresan, sobre todo, su deseo de que el docente vuelva a las aulas.
Comunicado de los estudiantes de filosofía y letras, profesional y licenciatura.
Para: La comunidad en general.
Hablan los viejos sobre tiempos mejores, de barrio pequeño, olor a café y una vieja casa. Hablan de épocas que ahora se fueron, que se disolvieron y llegamos nosotros.
Llegamos nosotros y escribimos cartas.
Escribimos esta carta, entonces, reunidos en un aula en donde hace poco se hablaba de arte, de poesía vieja y pensamiento ambiental. Prometimos, además, no recordar esta carta que no sabe a un buen tiempo. En cambio pedimos nos devuelvan la clase, y con ella al maestro. A Jaime, al profe, al de poco cabello y sonrisa muy ancha. El que impulsa a escribir, el que no niega una clase.
Pedimos esto porque es a él a quien en este momento se le imputa el delito de rebelión, y aunque leímos la ley, esta nos sigue siendo extraña. Ya son varios los años frecuentando sus clases, conociendo sus ideas y guardando algunas monedas para fotocopiar sus libros. En sus clases vimos peligros, y de esto nadie se asombre, pues nuestra continua apatía se va transformando en desastre ambiental. De guerras hablamos y seguiremos hablando, de fusiles y bombas, de rostros perdidos, y al igual que en la clase se seguirán condenando. No entendemos el delito que ahora le imponen, pues no fueron las armas ni el amor a la guerra lo que vimos en clase, sus clases tenían como objetivo el respeto a la tierra, la no contaminación, le preservación del planeta. Y para esto, sus armas fueron siempre la filosofía, el arte, la poesía y música, y si estas ideas están contra los ideales del gobierno, ¿cuál son entonces las ideas de dicho gobierno?
Escribimos esta carta, y ojalá no haya otra, pidiendo a profesores, estudiantes, mujeres, hombres y amigos, pidiendo al Estado y a todo el que pueda leerla, que nos regresen la clase, y con ella al maestro. Pedimos que, si de pruebas se trata, se nos tenga hoy en cuenta, se nos dé la palabra y hablemos del maestro. Pues, si de pruebas se trata, hoy ya somos mejores, caminamos sin prisa y gastamos menos agua. Hablamos más grato, escribimos con gusto. Si se trata de pruebas, daremos una clase, mostraremos pinturas que piden un mejor mundo; recitaremos el Pan y Vino que antaño cantó Hölderlin; mataremos los sueños de un mañana sin vida. Si se trata de pruebas, señores del juzgado, nosotros somos prueba.
Escribimos, nosotros, los estudiantes, los que en pocos años ocuparemos sus puestos, los que les pedimos nos dejen al Maestro, los que no quieren otra cosa que un futuro bueno y, si ustedes nos lo permiten, con un poco más de poesía.
Terminamos, entonces, esta breve carta. Que de humilde tiene todo y de agreste nada. No sin antes insistir que queremos ser prueba, motivo y agravante de la liberación del profesor Jaime, y para esto escribimos a padres, a jueces, a vecinos o allegados de nuestra ciudad, y a todo el que entienda que, para enseñar y hacernos buenos, un maestro es suficiente.
Estudiantes de Filosofía y Letras
Profesional y Licenciatura.
Fuente:Prensa Rural