El alcalde Gustavo Petro aseguró que no entiende por qué si está listo el lote y el dinero para la construcción de la sede de la Universidad Distrital en la localidad de Bosa, ni siquiera se ha hecho el contrato para hacer la construcción. No dijo cuándo sería la marcha.
"El consejo superior de la Universidad Distrital, ha mantenido congelada la decisión de contratar la construcción y eso no lo podemos admitir nosotros. Le están quitando el derecho de educación a la gente. Entonces, o la Universidad Distrital construye la sede, o la construimos nosotros y se la damos a otra universidad", señaló Petro.
Este mismo año, según el mandatario, debe construirse la sede de la Universidad pública. Se informó que el Distrito dispuso de 30 mil millones en el presupuesto, a través de los recursos de la Secretaría de Educación. Se calcula que el costo es de 65 mil millones de pesos, para 8 mil nuevos cupos.
Mientras tanto el rector de la Universidad, Inocencio Bahamón, señaló que hace pocas semanas se adquirió un lote anexo a la sede de Candelaria la Nueva, para ampliar la cobertura.
El 1 de enero de 2012, durante su discurso de posesión como alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro, anunció que él directamente manejaría la Universidad Distrital de Bogotá, para aumentar su capacidad en términos de cursos, carreras, programas y estudiantes, y para ello seis nuevas sedes.
Estas fueron sus palabras:
“Para esto tenemos que hacer una cirugía drástica en su interior, voy a asumir la presidencia del Consejo Superior de la universidad de manera crítica y directa, sin intermediarios y vamos a buscar otra vez a través de las nuevas leyes, recursos que nos permitan tomar en arriendo o pagar la construcción de seis sedes de la Universidad Distrital en el occidente de Bogotá, la gran ciudadela universitaria de occidente estamos estudiando, déjenlo un poco ya veremos en Planeación y alrededor de la discusión del POT, si lo que hoy es los terrenos de la llamada ALO, no nos permiten al mismo tiempo de ser una línea de transporte Ferrero de Tranvía en el occidente de la ciudad, ser también gran un espacio para el uso institucional donde podamos poner allí colegios, sedes universitarias, hospitales, campos deportivos, zonas verdes en un gran cinturón que la ciudad ya contó en todos sus terrenos y que podríamos tener disponible no solamente para el transporte sino para la realización de resto que hoy llamamos la revolución educativa en la ciudad”.