De acuerdo con portavoces de la ACES, durante el desalojo de la protesta, ocurrida el pasado viernes, una menor de 14 años de edad, identificada como Javiera Sepúlveda, sufrió una severa lesión abdominal, agravada por un cuadro de hemorragia.
Javiera debió ser hospitalizada al sufrir un sangramiento como resultado de una patada que le dio un carabinero, sostienen testigos del hecho y familiares de la estudiante.
A esa denuncia se sumaron los testimonios de jóvenes que fueron detenidos y que aseguran haber presenciado hechos de abuso sexual contra sus compañeras, a las que obligaron a desnudarse en la unidad policial.
Alfredo Vielma, vocero de la ACES, dijo que cuentan con material audiovisual probatorio de la violencia ejercida contra la treintena de estudiantes que protagonizó la manifestación en las orillas del Mapocho, donde pretendían instalarse hasta tanto el gobierno diera respuestas a sus demandas.
"Después de seis meses de movilización hemos decidido acampar indefinidamente a las orillas del Mapocho y así probar que los estudiantes no descansaremos hasta recuperar el derecho que nos ha sido arrebatado", anunciaron los secundarios en un comunicado.
A pesar del tiempo de movilizaciones, agregaron, no estamos cansados. Ya perdimos el año y estamos dispuestos a dar lo que sea necesario para que las futuras generaciones de Chile no sufran lo que nosotros como sociedad padecemos desde hace años.
En la declaración dada a conocer en el contexto de la protesta de ese día, la ACES denunció además la criminalización de las movilizaciones sociales en Chile.
Coincidente con tal punto de vista, Jorge Abedrapo, presidente Colegio de Profesores Metropolitano, afirmó en rueda de prensa en esta ciudad que hay un aumento desproporcionado de la represión en contra del movimiento por la educación pública.
Se ha recrudecido la represión y hasta existen casos de pagos a sicarios para que agredan a los estudiantes, señaló el líder magisterial.
Fuente: Kaos en la Red