Más de 20 mil estudiantes, profesores y representantes, entre otros, marcharon este jueves por las calles de Santiago (capital) para pedir al gobierno chileno que realice una reforma educativa que incluya una educación gratuita y de calidad.
Miles de estudiantes tomaron este jueves las calles de Santiago, la capital chilena, para manifestar a favor de una reforma educativa que cambie el sistema que rige este sector en el país desde la dictadura del general Augusto Pinochet (1973 – 1990).
Fuentes de la policía militarizada, o carabineros, revelaron a la prensa que los participantes de la manifestación sumaban más de 20 mil personas.
Los estudiantes, tanto universitarios como de secundaria, así como también profesores y padres y representantes, entre otros, partieron desde la plaza Italia y avanzó por la Alameda hasta calle Mac Iver para llegar a la Estación Mapocho en la capital
Los manifestantes portaban pancarta y gritaban consignas en las que exigían al gobierno una educación gratuita y de calidad.
En la víspera los dirigentes estudiantiles hicieron declaraciones a la prensa en las que instaron a los participantes de la protesta a mantener un comportamiento cívico y pidieron a los carabineros a resguardar la seguridad de los jóvenes y a no reprimirlos.
El presidente de la Federación de Estudiantes de Chile, Andrés Fielbaum, expresó que "las movilizaciones son las mejores herramientas que tenemos para poder transformar a Chile".
Fielbaum señaló también que quienes participan en la marcha son "todos quienes queremos construir un país que deje atrás la herencia de Pinochet".
En la estación Mapocho los estudiantes chilenos hicieron un acto donde presentaron un programa de 11 páginas con la recopilación de demandas históricas del movimiento estudiantil y del movimiento social.
Las protestas estudiantiles en Chile datan de mayo de 2011 y son la expresión actual contra un sistema educativo que tiene su origen en la dictadura de Augusto Pinochet, y que antecedió a la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza (LOCE). Esa legislación dejó al Estado como regulador y delegó gran parte de la enseñanza a entes privados.
Tras la movilización de 2006, conocida como la Revolución pingüina, una serie de manifestaciones de estudiantes secundarios (que, según cifras oficiales, reunieron a 550 mil asistentes) la LOCE fue reemplazada en 2009 por la Ley General de Educación, que tampoco ha satisfecho las demandas del alumnado.
Fuente: Telesur
